domingo, 11 de enero de 2015

Misiva









Ya ves. La vida avanza y los años pasan, a veces, con tanta lentitud que parecen tener pies de cemento, o cuerpo de tortuga…aquí permanezco, intentando no perder la cordura aunque, cuando me levanto y  miro el espejo no entiendo por qué veo en mi cabeza elefantes haciendo fila para ir al baño antes que yo….y no me asustan sólo que, tengo prisa por  salir al viento para que peine mis cabellos y así recordar tu aliento fresco  que era mi compañía,  antes de que este desencuentro  vital nos separara…

2 comentarios:

lichazul dijo...

la ausencia de lo amado nos hace sentir el tiempo congelado, y nos nacen manías parasitarias que la mente entreteje en escenarios tortuosos

besitos

Eloisa Echeverria dijo...

Gracias por tu compañía fiel y amigable querida Elisa. Mi abrazo fraterno.